Al menos tres miembros del Ejército paquistaní, incluido un oficial, y ocho supuestos insurgentes murieron este miércoles (30.10.2024) en un tiroteo en el noroeste de Pakistán, que se desató durante un operativo de las fuerzas de seguridad contra los grupos insurgentes que operan en esta región.
La operación se desarrolló en el volátil distrito de Bannu, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, informó en un comunicado la oficina de medios del Ejército (ISPR), que señaló que ocho miembros del proscrito Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP) murieron en el ataque.
«Durante la operación, nuestras propias tropas atacaron eficazmente la posición de Khwarij (como se refieren al TTP). Como resultado, ocho Khwarij murieron y siete resultaron heridos», afirmó el ISPR.
Sin embargo, el comunicado agregó que tres soldados paquistaníes murieron en el tiroteo.
Este tipo de operativos de las fuerzas de seguridad se han vuelto habituales en los últimos meses, en respuesta al repunte de violencia armada que experimenta el país.
Ataque insurgente a puesto policial
Este aumento de los ataques insurgentes coincidió con la llegada al poder de los talibanes al vecino Afganistán en agosto de 2021. La mayoría de los ataques tienen lugar en las provincias de Khyber Pakhtunkhwa y Baluchistán, ambas fronterizas con Afganistán.
El TTP ha sido uno de los grupos más activos, especialmente en Khyber Pakhtunkhwa, y aunque no está alineado con los talibanes afganos, comparte su ideología.
El TTP reivindicó la semana pasada un ataque a un puesto de control policial en el que murieron al menos 10 agentes de seguridad en Khyber Pakhtunkhwa.
Pakistán sostiene que el TTP utiliza suelo afgano para llevar a cabo ataques dentro de su territorio. Sin embargo, el gobierno de los talibanes afganos ha rechazado estas acusaciones.