El gobierno de China anunció el sábado (12.10.2024) que el país tiene 2,3 billones de yuanes (unos 325.000 millones de dólares) disponibles en bonos especiales para usar durante los próximos tres meses, en un intento por impulsar la economía en crisis.
«En los próximos tres meses, se puede disponer de un total de 2,3 billones de yuanes en fondos de bonos especiales», dijo el ministro de Finanzas, Lan Fo’an, en una conferencia de prensa en Pekín.
El muy esperado estímulo se sumó a una serie de medidas anunciadas durante las últimas semanas, como el recorte de las tasas de interés, y pretende robustecer a los bancos, apuntalar el mercado inmobiliario y liberar el gasto de consumo.
Se trata del mayor programa de ayuda de Pekín desde la crisis financiera mundial. Pese a la escala del paquete, el ministro Lan dijo que China podía llegar más lejos.
Pekín planea «emitir bonos gubernamentales especiales» para «mejorar la resistencia al riesgo y las capacidades de préstamo» de los bancos comerciales estatales «para servir mejor al desarrollo de la economía real», explicó Lan.
El techo de la deuda de los gobiernos locales también se reducirá para que inviertan en más infraestructura y contribuyan a proteger los empleos.
Pekín ha dicho que aspira a crecer el 5% por ciento este año, un número que cualquier país occidental quisiera, pero que está muy lejos de la expansión de dos dígitos que durante años sostuvo la economía china.