La Cámara de Diputados aprobó un proyecto de reformas para devolver la denominación de “empresas públicas” del Estado a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
Se reforman el párrafo quinto del artículo 25, los párrafos sexto y séptimo del artículo 27 y el párrafo cuarto del artículo 28 de la Constitución.
En materia eléctrica, CFE tendrá prevalencia sobre empresas particulares, si bien se precisa que “no constituirán monopolios las funciones que el Estado ejerza de manera exclusiva en áreas estratégicas”.
La planeación y el control del sistema eléctrico nacional tendrá como objetivos asegurar el servicio de electricidad en toda su cadena de valor, preservar la seguridad y autosuficiencia energética de la nación y proveer electricidad al menor precio posible, evitando el lucro.
El Estado quedará a cargo de la transición energética y utilizará de manera sustentable todas las fuentes de energía de las que dispone el país.
Dicho proyecto de reformas es parte del paquete enviado por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador en febrero pasado.
En lo general fue avalado en lo general con 353 votos a favor y 122 en contra; y en lo particular con 350 votos a favor, 111 en contra y una abstención.
Pasa así al Senado de la República para su análisis y discusión.