Pogacar estrena su arcoíris de campeón del mundo en el Giro de la Emilia, carrera en la que fue segundo en 2022 y 2023. Fuerte competencia: Remco, Roglic, Mas.
Los grandes depredadores nunca duermen, siempre están al acecho. Su voracidad es insaciable. Así es Tadej Pogacar (26 años), que cuando parece haberlo ganado prácticamente todo tras su reciente conquista del Mundial de ciclismo en Zúrich, todavía tiene apetito para más. Apenas seis días después de firmar la gran obra maestra de su carrera, con una escapada de 100 km que le dio el oro, el esloveno regresa a la competición en el Giro de la Emilia (15:00 h, Eurosport 1), escenario en el que estrenará el preciado maillot arcoíris (y bici nueva) que mostró ayer en las redes sociales del UAE Team Emirates.
La 107ª edición de la clásica italiana, que dará paso al Trittico Lombardo que tradicionalmente sirve para afinar la preparación de cara al Giro de Lombardía (12 de octubre), será importante para Pogacar por varias razones. El esloveno tratará de tachar de su lista de conquistas una de las pocas carreras que todavía se le resiste, ya que en sus dos participaciones acabó segundo: detrás de Enric Mas en 2022 y de Primož Roglič en 2023. A ambos deberá hacerles frente una vez más, al igual que la fuerte competencia que lidera Remco Evenepoel. Y no menos importante: Pogacar aspira a acabar como el corredor con más victorias del Siglo XXI en una misma temporada. Para ello deberá ganar las tres pruebas que le quedan este año: Emilia, Tres Valles Varesinos (día 8) y Lombardía. De lograrlo, sumaría 26 triunfos, uno más que los 25 de Alessandro Petacchi en 2005.
“Este período del año siempre es uno de mis favoritos para competir y será aún más especial ahora que llevo el maillot de campeón del mundo. Lo que sucedió en Zúrich fue un sueño para mí. Lo que ocurra a partir de ahora será un plus, pero dada la increíble temporada que hemos tenido como equipo, queremos esforzarnos hasta la última carrera y terminar con una nota alta. Estas clásicas de final de año en Italia son carreras hermosas y emocionantes. Estamos listos para dar lo mejor de nosotros”, declaró Pogacar en las horas previas a una carrera en la que partirá con las espaldas bien cubiertas. Juan Ayuso, Majka, Vine o Adam Yates, gregarios de lujo.
El recorrido (215,3 km), como no podía ser de otro modo para un corredor de su versatilidad, le va como anillo al dedo al bueno de Pogi, con 3.400 metros de desnivel positivo y los cinco ascensos consecutivos a San Luca que conducen a meta: 2 km al 9,4% de promedio. Jorgenson, Healy, Tiberi, Pidcock, Williams, Gaudu o Simon Yates, entre otros, tratarán de colarse en la fiesta de los gallos, esa en la que Pogacar no acostumbra a admitir invitados.
