El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, asistirá a los debates de alto nivel de la 79 Asamblea General de las Naciones Unidas donde “denunciará” el impacto del embargo económico impuesto por EE.UU., informó este viernes la Cancillería de Cuba.
Rodríguez adelantó en X que denunciará “el impacto del bloqueo (embargo económico) de EE.UU. contra Cuba y promoveremos multilateralismo, paz y desarrollo sostenible para todos”.
La agenda del canciller cubano en la ONU incluye además su participación en la Cumbre del Futuro y un encuentro con cubanos -afines al Gobierno- residentes en Estados Unidos, según comunicó la Cancillería.
La comitiva en la ONU
Al titular cubano de Exteriores le acompañan los vicecancilleres Anayansi Rodríguez y Carlos Fernández de Cossío y la directora general de Asuntos Consulares y Cubanos Residentes en el Exterior, Ana Teresita González, entre otros funcionarios.
Más de un centenar de jefes de Estado y Gobierno asistirán a la cita anual del organismo que tendrá lugar el 22 y 23 de septiembre y analizarán en Nueva York -sede del organismo internacional- temas relacionados con la Agenda 2030 y otros asuntos.
La Asamblea General, creada en 1945 en virtud de la Carta de las Naciones Unidas, es el órgano principal de las Naciones Unidas de deliberación, adopción de políticas y representación, según recoge la página de la ONU.
El informe de Cuba sobre bloqueo económico de EE.UU.
El informe anual sobre el bloqueo (embargo), presentado la semana pasada, es la base documental de la resolución que La Habana presenta cada año desde hace más de tres décadas en contra de estas sanciones ante la Asamblea General de Naciones Unidas, y que tiene un respaldo mayoritario de sus miembros.
Según la estimación oficial, el impacto entre marzo de 2023 y febrero de este año fue superior en 189,8 millones de dólares al que supuso en los doce meses previos.
El total tras más de 60 años de sanciones asciende a más de 164.141 millones de dólares a precios corrientes, asevera La Habana.
El Gobierno insular argumenta que, sin sanciones estadounidenses, la isla hubiese logrado un crecimiento de su producto interno bruto (PIB) “a precios corrientes” del 8 % en 2023, en contraste con la caída del 1,9 % con la que cerró el año pasado, según cifras oficiales.
Cuba se encuentra sumida desde hace más de cuatro años en una grave crisis económica y su Gobierno acusa principalmente a las sanciones estadounidenses de esta situación.
En el agravamiento de los desequilibrios estructurales de la economía cubana influyen asimismo de forma notable las consecuencias de la pandemia y ciertas decisiones de política económica y monetaria del Gobierno cubano, han reconocido.