El Gobierno de Colombia anunció este miércoles (18.09.2024) la suspensión de las negociaciones de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), un día después de un ataque contra una base militar que dejó dos soldados muertos y 29 heridos en el noreste del país.
«El proceso de diálogos de paz queda suspendido», informó en la red social X la delegación del Gobierno en la mesa de diálogo, que adelantó que las conversaciones solo serán retomadas «con una manifestación inequívoca de la voluntad de paz» del grupo insurgente.
El martes 17 de septiembre, un camión cargado de explosivos artesanales fue detonado frente a un batallón del Ejército en el poblado de Puerto Jordán, en el departamento de Arauca (noreste).
El presidente izquierdista Gustavo Petro calificó el atentado como «una acción que cierra un proceso de paz con sangre», en una publicación el mismo martes en su cuenta de X.
Se trata del último episodio de una escalada de embates del ELN contra objetivos oficiales desde inicios de agosto de 2024, cuando decidió no retomar el cese el fuego con las fuerzas militares.
Conflicto armado de seis décadas
La tregua, que regía desde 2023, era parte de una serie de acuerdos alcanzados durante los diálogos de paz que el Gobierno lleva a cabo con la guerrilla desde finales de 2022.
Petro, que intenta desactivar el conflicto armado de seis décadas dialogando con guerrillas y bandas criminales, visitó este miércoles a los uniformados lesionados que son atendidos en el Hospital Militar de Bogotá, adonde fueron trasladados desde Arauca.
El ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, había dicho más temprano que las negociaciones de paz con el ELN estaban detenidas.
«Hoy lo que tenemos es prácticamente una conversación, una negociación, unos diálogos que no existen ya desde hace varias semanas», dijo el ministro en una entrevista a Blu Radio.
En armas desde 1964, el ELN cuenta con unos 5.800 miembros, según inteligencia militar.