Hugh Jackman, célebre actor australiano, ha revelado en diversas entrevistas los profundos efectos que la Meditación Trascendental (MT) ha tenido en su vida personal y profesional. En un evento reciente de la David Lynch Foundation, Jackman compartió cómo la meditación transformó su existencia desde que comenzó a practicarla hace más de tres décadas.
Según el medio People, Jackman explicó: “Lo empecé cuando era un estudiante de actuación más joven. Pensé que realmente me ayudaría con mi actuación. Eso es por lo que fui y lo hizo”. Destacó que la MT no solo le ha proporcionado beneficios en su carrera artística, sino que ha mejorado abismalmente todas las áreas de su vida. “Muy rápidamente me di cuenta de que cambió todo en mi vida para mejor: mis relaciones, mi sentido de quién soy, mi responsabilidad con quién soy”.
En otra entrevista, Jackman recordó su infancia marcada por la ansiedad y diversos miedos. “Yo era un niño muy ansioso en muchos sentidos. Tenía muchos miedos. Tenía miedo a las alturas, tenía miedo a la oscuridad, tenía miedo de lo que la gente pensara… y odiaba la prisión de ese miedo”. Para Jackman, la meditación ofreció un refugio contra estos temores: “Con la meditación, mis niveles de ansiedad bajaron considerablemente”, afirmó.
La práctica regular de la MT ha jugado un papel crucial en mantener su energía y creatividad durante largos días de filmación. Jackman medita a diario en el set durante la hora del almuerzo: “Me tomo ese reset al mediodía. Puedo volver por la tarde y mientras veo a otros en el set un poco cansados, yo estoy listo para seguir.” Esto ha sido particularmente útil en su duelo de bromas y actuaciones espontáneas con su cocreador Ryan Reynolds.
Según Meditation Lifestyle, Jackman también reflexionó sobre cómo la MT le ayudó a abordar sus obsesiones y preocupaciones diarias: “La mente puede hacer que nos preocupemos por cosas que van más allá de su medida. Y lo bueno de la meditación es que dos veces al día, la mente de mono simplemente se calma”.
Practicar meditación durante 30 minutos al día, según estudios recientes, seis días a la semana y de forma continua durante varios meses, puede reducir los niveles de cortisol, conocida como la ‘hormona del estrés’, hasta en un 50%. Este hecho resuena tanto con estrellas como Jennifer Aniston y Jackman, quienes son devotos de esta práctica. Jennifer Aniston, en particular, ha sostenido una rutina de autocuidados que incluye ejercicio, meditación y café, sin excepción, todos los días. Mientras tanto, Jackman compartió con Men’s Health que la Meditación Trascendental le ayudó a dominar el trastorno obsesivo-compulsivo que padecía en su juventud: “Me funciona como herramienta para centrarme y relajarme. Gracias a la meditación vivo tranquilo y feliz”.
El actor de Wolverine, subrayó los beneficios profesionales de la meditación, especialmente para quienes se enfrentan a los rigores del estrés constante en su línea de trabajo. “Una de las cosas que tiene mi trabajo es que hay un alto nivel de estrés que es fácil de aceptar. No importa cuánto tiempo lo estés haciendo. En cada nuevo puesto hay algún elemento que es riesgoso, aterrador y potencialmente muy estresante”, mencionó. Agregó cómo la claridad mental y la economía de energía que obtiene a través de la meditación lo ayuda a tomar decisiones más auténticas y a escuchar mejor a los demás, cualidades fundamentales, según él, para cualquier actor.
A través de estas entrevistas y eventos, Jackman ha disipado mitos comunes sobre la práctica de la meditación, resaltando que cualquier persona, independientemente de sus creencias religiosas o su agenda ocupada, puede beneficiarse de esta. “Puedes ser un ateo que medita, un cristiano que medita o un musulmán que medita. Es como decir: ‘¿Caminar es algo religioso?’ No. Está al alcance de cualquiera y la calidad de tu vida cambia para siempre”, afirmó. Él mismo convierte sus descansos diarios en una oportunidad para meditar, equiparando esta disciplina con actividades tan rutinarias como ducharse.
Hugh Jackman continúa siendo un firme defensor de la Meditación Trascendental, atribuyendo gran parte de su equilibrio emocional y profesional a esta práctica.