Una demanda presentada por Julie Adams, miembro de la junta electoral del condado de Fulton, en la que solicitaba que los deberes de los miembros de la junta electoral fueran de carácter discrecional y no ministerial, fue desestimada por el juez Robert McBurney debido a un tecnicismo. La ley de Georgia requiere que los funcionarios del condado certifiquen los resultados electorales después de verificarlos, y Adams buscaba que el tribunal declarara que esa función no sea obligatoria. Sin embargo, la demanda fue rechazada.
El juez McBurney explicó que la inmunidad soberana protege a los gobiernos locales y estatales de ser demandados a menos que consientan en serlo. No obstante, una enmienda constitucional aprobada en 2020 permite una exención limitada para demandas que buscan aclarar el significado de una ley. Adams intentó presentar su caso bajo esta exención, pero no incluyó al gobierno estatal o local como parte demandada, lo que resultó en el rechazo de su demanda.
Aunque Adams intentó enmendar la demanda para que se dirigiera al condado de Fulton, McBurney concluyó que el cambio fue insuficiente y tardío, y que el error de la demanda era irreparable en ese momento. A pesar de ello, McBurney destacó que esta decisión no significa el fin de la disputa legal.
El juez mencionó que Adams podría volver a presentar la demanda correctamente, nombrando a la parte adecuada. Si lo hace, el proceso legal se reanudaría desde donde se detuvo, y es probable que continúen con los mismos abogados y argumentos.
Este fallo deja abierta la posibilidad de que la cuestión de la discrecionalidad de la junta electoral sea reconsiderada en el futuro si se sigue el procedimiento correcto.