El miércoles, el sheriff del condado de Barrow, Jud Smith, elogió la efectividad del sistema de alerta Centegix, utilizado durante el reciente tiroteo en la escuela secundaria Apalachee. Smith explicó que el sistema activó 26 alertas y que solo cinco minutos después de la primera alarma, el sospechoso fue detenido, destacando la rapidez y efectividad de la tecnología en situaciones de emergencia.
Centegix es ampliamente utilizado en Georgia, con más del 80% de las escuelas del estado implementando el sistema, según su sitio web. Entre esas escuelas se encuentran las escuelas públicas de Atlanta. William Wade, director de la escuela secundaria Booker T. Washington, comentó que el sistema ya ha sido crucial en emergencias médicas, salvando vidas. Wade subrayó la importancia de la formación continua para el uso adecuado de este sistema, garantizando que los maestros y personal estén preparados en caso de necesidad.
A pesar de la eficacia probada de estos sistemas, no todas las escuelas en Georgia están obligadas a tener un sistema de alerta. Un proyecto de ley, conocido como la Ley de Alyssa, que habría requerido sistemas de botones de pánico en todas las escuelas públicas, no logró avanzar en la Asamblea General de 2023. Esta propuesta lleva el nombre de Alyssa Alhadeff, una joven de 14 años que murió en el tiroteo de Parkland, Florida.
Aunque la ley no fue aprobada, muchas escuelas en Georgia han decidido implementar estos sistemas de manera voluntaria. Además, el gobernador Brian Kemp destinó más de 100 millones de dólares en el presupuesto estatal para este año escolar, enfocados en mejorar la seguridad en las escuelas, proporcionando a cada institución una asignación de 45,000 dólares para gastar en medidas de seguridad según su criterio.
El uso de estos fondos por parte de las colegios varía, pero el objetivo sigue siendo claro: fortalecer la seguridad escolar para proteger a estudiantes y personal ante cualquier emergencia que pueda surgir.