En un esfuerzo por mejorar las condiciones de las calles de Atlanta, los líderes de la ciudad están considerando la posibilidad de adquirir propiedades en mal estado cuyos propietarios han descuidado su mantenimiento a lo largo de los años. La semana pasada, el consejo municipal aprobó un «impuesto a la plaga», que penaliza a estos propietarios negligentes, y surgió la idea de utilizar fondos públicos para comprar estas propiedades abandonadas.
El concejal de Atlanta, Michael Bond, explicó que las opciones de la ciudad en cuanto al desarrollo inmobiliario son diversas. Bond señaló que responder a emergencias en propiedades abandonadas es una práctica frecuente y costosa para los servicios de emergencia de la ciudad, incluyendo incidentes como la presencia de vagabundos, incendios y vertederos ilegales.
Para hacer frente a este problema, Bond y otros miembros del consejo están explorando la posibilidad de que la ciudad compre estas propiedades de los dueños negligentes. Según Bond, ofrecer una transacción a estos propietarios podría ahorrar millones a la ciudad a largo plazo y abrir oportunidades para desarrollar viviendas más asequibles.
Una de las propuestas es transferir estas propiedades a las autoridades de vivienda urbana o mediante un proceso de licitación seleccionar desarrolladores privados que puedan rehabilitarlas. Sin embargo, Bond destacó que la ciudad no puede utilizar el dominio eminente para tomar estas propiedades debido a las restricciones del código estatal de Georgia.
Las discusiones sobre estas propuestas continuarán en la próxima reunión de los líderes de la ciudad, quienes están comprometidos en encontrar soluciones para revitalizar las áreas más afectadas de Atlanta.