Al menos 22 personas que viajaban en autobuses y camiones murieron en una acción insurgente en el sur de Pakistán, donde un grupo de hombres armados procedieron a examinar la identidad de los pasajeros y les atacaron en base a su etnia y lugar de origen, afirmó este lunes (26.08.2024) una fuente oficial.
El suceso tuvo lugar en la mañana del lunes, en la empobrecida provincia sureña de Baluchistán, donde las fuerzas de seguridad enfrentan una ola de violencia étnica, sectaria y separatista.
Víctimas de Punyab y Baluchistán
«Al menos 22 personas murieron y 5 resultaron heridas cuando militantes detuvieron varios buses, camiones y furgonetas en una carretera entre Punyab y Baluchistán», dijo a la AFP Najibullah Kakar, un alto funcionario en Musakhel.
«Unos 25 hombres armados bloquearon una carretera» y «ordenaron a aquellos procedentes de (la provincia de) Punjab descender de los vehículos tras verificar sus tarjetas de identidad», dijo a la agencia de noticias EFE un oficial de Policía del distrito de Musakhel, Karam Khan.
El funcionario consultado por AFP Indicó que murieron 19 punyabíes y tres de personas Baluchistán, en su mayoría trabajadores. Hameed Zehri, otro alto cargo del distrito, confirmó el saldo de víctimas.
Las agencias Reuters y DPA elevaron luego la cifra de muertos en estos ataques a 23, citando a autoridades locales.
Una serie de ataques terroristas
En esta misma jornada, en un ataque separado, hombres armados mataron al menos a 10 personas, incluidos 5 policías y 5 civiles, en el distrito de Kalat, en Baluchistán, según informaron las autoridades y reportan las agencias AP y DPA, que informan también de tiroteos en otras partes de la provincia.
La cifra total de muertos sobrepasa así la treintena, según las autoridades, que hablaron de una serie de ataques terroristas que tuvieron como objetivo a policías, residentes locales y pasajeros.
Los terroristas lanzaron ataques en al menos tres regiones diferentes y apuntaron a vías ferroviarias, un gasoducto y una estación de policía, dijo Shahid Rind, un portavoz gubernamental provincial.
Ihsanullah Khan, de la policía local, confirmó que los terroristas que habían atacado una estación de policía en Kalat. Los militantes también detonaron una vía férrea en la región de Bolan y dañaron un gasoducto en el área de Dera Bugti.
Violencia étnica, sectaria y separatista
El Ejército de Liberación Baluchistán (BLA) se atribuyó la responsabilidad de los ataques. El BLA es el grupo prohibido de insugentes separatistas más activo en la región. Y Baluchistán, la provincia más grande pero más volátil y pobre de Pakistán.
Baluchistán se enfrenta a múltiples frentes de violencia a manos de militantes islamistas, grupos sectarios y rebeldes nacionalistas. Los ataques rebeldes a trabajadores de otras provincias, especialmente a los que trabajan en proyectos iniciados por China en el marco de un plan de inversión de 62.000 millones de dólares, son habituales.
Muchas personas de Punjab y otras partes del país se trasladan a Baluchistán para buscar empleo en proyectos dirigidos por empresas chinas.
Al menos otras tres personas murieron y otras 18 resultaron heridas además, al explotar una bomba en el mercado de Razmak, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, en el noroeste de Pakistán, según informó la Policía, en esta jornada marcada por la violencia de los ataques insurgentes y choques con las fuerzas de seguridad en el sur del país.