Cuatro oficiales de seguridad de la cárcel del condado de Fulton fueron arrestados por su presunta participación en un esquema de contrabando, informó la Oficina del Sheriff del condado. Las agentes fueron acusadas de varios delitos, incluidos la posesión de artículos prohibidos, conspiración para cometer un delito grave y, en algunos casos, contacto sexual inapropiado con reclusos. Las investigaciones revelaron que las oficiales facilitaron el ingreso de teléfonos celulares, cigarrillos y otros artículos prohibidos a los reclusos a cambio de pagos.
La oficial LaQuna Ballard, de 34 años, fue acusada de enviar fotos explícitas a un recluso y de aceptar pagos por contrabando de celulares y cigarrillos. Regina Harris, de 26 años, fue acusada de proporcionar un teléfono celular a un recluso. Anizya Silas, de 24 años, está acusada de entregar un cargador de teléfono y comida no autorizada a un recluso. Por su parte, Breaisha Tate, de 26 años, enfrenta cargos por mantener relaciones sexuales con un recluso y contrabandear teléfonos celulares.
El Sheriff del condado de Fulton, Pat Labat, condenó las acciones de las oficiales, subrayando que sus empleados deben adherirse a altos estándares de integridad. Labat aseguró que se esperan más arrestos mientras continúa la investigación. Las autoridades lamentan que las agentes hayan optado por infringir la ley, traicionando la confianza depositada en ellas para vigilar a los reclusos.