Egipto, uno de los mediadores clave en el conflicto en Gaza, expresó el miércoles su escepticismo luego de que surgieron nuevos detalles sobre la propuesta para superar las diferencias en las conversaciones de cese al fuego entre Israel y Hamás, un día antes de la reanudación de las negociaciones en El Cairo.
Los desafíos que rodean a la llamada propuesta para superar diferencias parecen socavar el optimismo de un inminente acuerdo que el secretario de Estado, Antony Blinken, mostró en su más reciente visita a Oriente Medio esta semana.
Los esfuerzos diplomáticos se han redoblado conforme crecen los temores de una guerra a escala regional tras los recientes asesinatos de líderes de Hamás y Hezbollah atribuidos a Israel, y las amenazas de represalias.
El presidente estadounidense Joe Biden habló el miércoles con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, informó la Casa Blanca, sin dar detalles de inmediato sobre la conversación.
Funcionarios de Egipto, que tiene un papel sin precedentes de mediador y parte afectada, ya que comparte frontera con Gaza, dijeron a The Associated Press que Hamás no aceptará la propuesta de superación de diferencias por varias razones, además de su recelo sobre si un acuerdo realmente provocará el retiro de las fuerzas israelíes de Gaza y dará fin a la guerra.
Un funcionario egipcio, que tiene un conocimiento directo de las negociaciones, dijo que la propuesta para superar diferencias exige la implementación de la primera fase del acuerdo, que es la liberación, por parte de Hamás, de los rehenes civiles más vulnerables capturados en el ataque del 7 de octubre que desencadenó la ofensiva militar israelí. En la primera fase, las partes negociarían las fases segunda y tercera sin “garantías” a Hamás por parte de Israel o de los mediadores.
“Los estadounidenses ofrecen promesas, no garantías”, dijo el funcionario. “Hamás no aceptará esto, porque prácticamente significa que liberará a los rehenes civiles a cambio de una pausa de seis semanas en la lucha sin garantías de un cese al fuego permanente y negociado”.
También señaló que la propuesta no indica claramente que Israel retirará sus fuerzas de dos corredores estratégicos en la Franja de Gaza, el corredor Philadelphi que se extiende a lo largo de la frontera entre Gaza y Egipto, y el corredor Netzarim que atraviesa el territorio de este a oeste. Israel ofrece reducir su presencia militar en el corredor Philadelphi, con la “promesa” de retirarse de la zona, explicó.
“Esto es inaceptable para nosotros y, desde luego, para Hamás”, dijo el funcionario egipcio.
Un segundo funcionario egipcio, quien fue informado sobre los más recientes acontecimientos en las negociaciones, señaló que había pocas posibilidades de un avance, ya que Israel se niega a comprometerse a un retiro total de Gaza durante la segunda fase del acuerdo. El funcionario dijo que Israel también insiste en mantener una presencia militar en el corredor Philadelphi y tener el control absoluto del corredor Netzarim.
También comentó que Egipto le informó a Estados Unidos e Israel que no reabrirá el cruce de Rafah hacia Gaza, un punto crucial para el ingreso de ayuda humanitaria, sin que haya un retiro absoluto de las fuerzas israelíes del lado palestino y del corredor Philadelphi, en donde Israel quiere evitar que Hamás reabastezca su arsenal a través de túneles. El ministro de Defensa de Israel afirma que más de 150 túneles para el contrabando han sido destruidos.
Ambos funcionarios egipcios hablaron bajo condición de anonimato a fin de revelar las discusiones. Los mediadores tienen programado reunirse el jueves y viernes en El Cairo para continuar con las pláticas en torno a la propuesta antes de presentarla formalmente a Hamás.
Bassem Naim, un miembro de la rama política de Hamás, dijo el martes que la iniciativa incluyó varias nuevas demandas de Netanyahu, incluida una de que las fuerzas israelíes permanezcan en Rafah, Philadelphi y Netzarim y registren a palestinos desplazados que regresen al norte de Gaza. Israel ha dicho que los cacheos son necesarias para localizar combatientes.
Naim dijo que la propuesta también incluye cambios no especificados al intercambio de rehenes cautivos en Gaza por palestinos presos en Israel, además de que no garantiza que el cese del fuego se mantenga durante las negociaciones sobre la transición de la primera a la segunda fase del acuerdo.
En versiones previas del plan de cese del fuego, la segunda fase supondría un cese del fuego permanente, el retiro total de las fuerzas israelíes de Gaza y la liberación del resto de los rehenes varones, tanto civiles como militares.
Después de su visita a Egipto y Qatar —otro mediador—, Blinken dijo que la propuesta es “muy clara sobre el momento y los lugares para el retiro (de las fuerzas israelíes) de Gaza”, pero no han surgido detalles sobre ninguno de esos aspectos.
Blinken añadió que debido a que Israel aceptó la propuesta, el enfoque actual es hacer todo lo posible para “que Hamás haga lo mismo”. El diario egipcio Al-Ahram informó que Blinken recibió una “clara demanda de Egipto para que Estados Unidos realice labores hacia un acuerdo bien establecido con plazos y objetivos claros para alentar a que Hamás acepte”.
Pero existe escepticismo, y hartazgo, entre muchos en Israel en lo referente al compromiso de Netanyahu por concretar un acuerdo.
“Mientras todo el grupo de negociadores profesionales crea que Netanyahu está saboteando un acuerdo, no habrá confianza”, dijo el analista Nadav Eyal en un artículo publicado en el diario Yedioth Ahronoth.
La guerra en Gaza, que comenzó hace más de 10 meses, ha causado una destrucción generalizada y ha obligado a la gran mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza a abandonar sus hogares. Grupos humanitarios temen que surjan brotes de polio y otras enfermedades.
El ataque de Hamás y otros combatientes del 7 de octubre cobró la vida de unas 1.200 personas en Israel, en su mayoría civiles. Más de 100 rehenes fueron liberados durante un cese del fuego el año pasado. Se cree que Hamás aún retiene a unas 110 personas. Las autoridades israelíes calculan que alrededor de la tercera parte de ellos han muerto. Esta semana se recuperaron los cuerpos de seis rehenes en Gaza.
La respuesta militar de Israel ha dejado más de 40.000 palestinos muertos, según el ministerio de Salud de Gaza, cuyo conteo no distingue entre civiles y combatientes. El miércoles ataques con drones y tanques israelíes en las ciudades de Jan Yunis y Deir al Balah mataron a por lo menos 17 personas, según personal de un hospital y periodistas de AP que contaron los cadáveres.
También el miércoles, Netanyahu realizó su primera visita al norte de Israel desde que Israel asesinó a un comandante de Hezbollah el mes pasado en Beirut.
“Estamos listos para cualquier circunstancia, tanto de manera defensiva como ofensiva”, dijo el mandatario al visitar a la tropa.