Alemania se colgó este viernes su cuarto bronce del fútbol femenino olímpico al vencer 1-0 a la campeona del mundo, España, que regresará a casa con las manos vacías, a pesar de su favoritismo en su debut histórico en los Juegos Olímpicos.
Giulia Gwinn, de 25 años, marcó de penal el único tanto (65) del partido por el tercer puesto disputado en el estadio de Lyon, donde los pocos asistentes observaron un final dramático.
Las campeonas en los Juegos de Rio de Janeiro-2016 dieron una nueva bofetada a la Roja, ya golpeada por la contundente caída contra Brasil (4-2) en semifinales, y sumaron su quinto metal en las justas: el dorado en Rio y los terceros puestos en Sídney-2000, Atenas-2004, Pekín-2008 y ahora París-2024.