La severa derrota sufrida por el campeón de la Bundesliga ante el Arsenal sonó como una llamada de alerta para el entrenador español.
Xabi Alonso no parecía muy maltratado, pero en el fondo el entrenador del Bayer Leverkusen se sentía tundido después de la dura derrota por 4-1 ante el Arsenal FC, en amistoso realizado en Londres. «Tal vez necesitábamos una bofetada. Hoy la recibimos, y fuerte», dijo el español después de una de las raras derrotas de su club, poco antes del inicio de la temporada en la Bundesliga.
Por supuesto, Alonso tampoco quería sobreestimar la derrota en Londres; después de todo, se trató de un partido de prueba. Pero el empate 2-2 en Lens cuatro días antes ya había demostrado que, después de una temporada liguera invicta, la misión de defender el título no será fácil. «Sin duda fue una llamada de atención. En el fútbol el pasado no trae puntos ni victorias. Empezamos de cero», advirtió Alonso.
«Olvidar» rápidamente el furor de los últimos meses, como exigía el técnico del Bayer, no será sencillo. El sábado, el Bayer Leverkusen se presentará por primera vez en meses ante sus aficionados en el BayArena, y será contra el Betis Sevilla. Y, sin embargo, el Bayer Leverkusen quiere evitar mirar constantemente por el espejo retrovisor.
Hasta ahora esto ha funcionado de manera brillante: las nuevas incorporaciones Martin Terrier, Aleix García y Jeanuel Belocian ilusionan, y todavía no hay salidas destacadas en la plantilla. El traspaso del internacional alemán Jonathan Tah al Bayern Múnich sigue siendo un problema, pero en Londres Tah estuvo en el once inicial, e incluso dirigió al equipo al campo como capitán.
Sin embargo, no queda mucho tiempo ni para un traspaso ni para ponerse en forma: el 17 de agosto se jugará el primer partido oficial de la Supercopa contra el subcampeón, el VfB Stuttgart, y seis días después, el partido inaugural de la Bundesliga contra Borussia Mönchengladbach. Las expectativas son altas.
Lo cierto es que en Londres, el encargado de la bofetada que mencionó Xabi Alonso fue en buena parte un exjugador del Leverkusen: Kai Havertz. Tras la victoria 4-1 de sus Gunners, se le preguntó al delantero alemán qué esperaba de su antiguo club. La respuesta fue más que clara: «Lo mismo que el año pasado».
