Polonia ha pedido a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) intervenir en el caso promovido por Ucrania contra Rusia por presunto genocidio, procedimientos iniciados a finales de febrero de 2022, como respuesta a la agresión militar rusa.
En su solicitud, afirma que «como parte de la Convención sobre el genocidio, Polonia tiene un interés jurídico… en la correcta aplicación de la Convención por otros Estados. Consciente de su propia obligación de impedir la violación de la Convención sobre genocidio, Polonia es consciente de que no puede transferir armas ni prestar otro tipo de ayuda a un Estado que comete genocidio».
«Por lo tanto, una acusación de genocidio dirigida a Ucrania afecta simultáneamente a la posición jurídica de Polonia como Estado que proporciona una amplia gama de apoyo a Ucrania, incluidas sus regiones orientales, desde 2014», reza el documento de la CIJ.
Ucrania inició los procedimientos a finales de febrero de 2022, como respuesta a la agresión militar rusa. Acusó a Rusia de violar la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, en una denuncia a la que a la postre se sumaron más de una treintena de países, entre ellos España.
Rusia, por su parte, puso en cuestión las competencias del tribunal con sede en La Haya, que ya en marzo de 2022 solicitó el cese «inmediato» de la ofensiva. Sin embargo, la CIJ rechazó a principios de este año una batería de objeciones presentadas por Moscú para tumbar la denuncia.