El presidente estadounidense, Joe Biden, está superando satisfactoriamente su contagio por COVID-19, mientras sus síntomas mejoran “de manera constante”, informó este sábado el médico del mandatario, Kevin O’Connor.
A través de una carta dirigida a la Casa Blanca, O’Connor afirmó que se ha identificado a la variante que ha afectado al presidente de 81 años, la KP.2.3, que representa aproximadamente el 33.3 por ciento de las nuevas infecciones en Estados Unidos, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
El presidente Biden completó su sexta dosis de Paxlovid esta mañana y “todavía experimenta tos suelta e improductiva y ronquera, pero sus síntomas continúan mejorando de manera constante”.
“Su el pulso, la presión arterial, la frecuencia respiratoria y la temperatura permanecen absolutamente normales. Su saturación de oxígeno sigue siendo excelente con el aire ambiente. Sus pulmones permanecen limpios”, detalla el informe médico.
El presidente seguirá siendo tratado con Paxlovid y, mientras se recupera de la enfermedad aislado en su vivienda de Delaware, “continúa desempeñando todas sus funciones presidenciales”, apunta el médico.
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Todavía no está claro cuándo se le dará el alta al presidente pero, según informó hoy su campaña podría ser “durante la próxima semana”, cuando Biden reanude sus actos de campaña.
“Tan pronto como tengamos luz verde, volveremos a estar en la campaña”, apuntó en una llamada con medios el portavoz de la campaña, Michael Tyler.
Todo ello pese a las crecientes críticas sobre su idoneidad para ser el candidato demócrata y a que cada vez más demócratas del Congreso le piden que ponga fin a su candidatura para las elecciones de noviembre. Al menos una treintena han pedido a Biden públicamente que se retire.
