Las autoridades chinas interceptaron un buque pesquero taiwanés que navegaba cerca de las islas Kinmen, un archipiélago bajo control de Taipei y ubicado a escasos kilómetros de China, y lo llevaron a un puerto chino, informó el miércoles (03.07.2024) la Administración de la Guardia Costera (CGA) de Taiwán.
La embarcación ‘Tachinman 88′ navegaba el martes por la noche a unas 23,7 millas náuticas (43,89 kilómetros) al noreste del puerto de Liaoluo cuando fue «abordada” y «detenida” por dos barcos de la Guardia Costera china, según un comunicado difundido por la CGA.
En respuesta, Taiwán envió a tres barcos de su propia Guardia Costera para tratar de rescatar al buque y emitió advertencias por radio exigiendo su «inmediata liberación”, pero la contraparte china respondió que «no intervinieran” en el proceso.
Posteriormente, la CGA detectó la presencia de otros cuatro barcos de la Guardia Costera de China aproximándose al lugar del incidente, y al final optó por suspender las tareas de rescate para «evitar una escalada del conflicto”, señaló el texto oficial.
Zona de pesca conjunta
El director de la Agencia de Pesca de Taiwán, Chang Chih-sheng, dijo que el área en cuestión era «una zona marítima en donde pescadores de ambos lados del estrecho trabajan juntos”, e instó a China a gestionar la situación «de forma pragmática” y a liberar el barco y su tripulación «lo antes posible”.
Las islas Kinmen, uno de los principales focos de conflicto entre Taipéi y Pekín desde el final de la guerra civil china en 1949, se sitúan a escasos diez kilómetros de la ciudad china de Xiamen y a otros 180 kilómetros de la isla principal de Taiwán.
La tensión en torno a este archipiélago, en donde viven alrededor de 100.000 taiwaneses, se disparó el pasado 14 de febrero, cuando una lancha rápida china -que no tenía certificado, nombre ni número de registro en puerto- irrumpió en aguas de las Kinmen y dos de sus cuatro tripulantes fallecieron tras una persecución de la Guardia Costera de Taiwán.
Tras este suceso, China anunció «patrullas» para «proteger las vidas y las propiedades de los pescadores», lo que se ha traducido en una actividad cada vez más frecuente de los buques de su Guardia Costera en esta zona.