No hubo tiempo para más! Celebran las selecciones de Eslovaquia y Rumanía su pase a octavos de final tras firmar un empate (1-1) que confirma la presencia de ambos bloques en la siguiente ronda.
El equipo dirigido por Edward Iordanescu supera la fase de grupos como primera clasificado, mientras que el combinado de Francesco Calzona lo hará como tercera, quedando por detrás de Bélgica.
Parece que el encuentro estaba abocado a un empate que satisfacía a ambas selecciones a pesar de haber visto una primera mitad mucho más animada y que, en su segunda parte, se difuminó, donde solo tuvieron lugar ocasiones de peligro hasta la realización del primer cambio del encuentro, momento en el que pareció firmarse un pipa de la paz.
A pesar de los intentos de una Eslovaquia que quiso más, su ineficacia en los últimos metros, topándose en varias ocasiones con la respuesta de un solvente Florin Nita, terminó echando por tierra sus intentos, dando por buenas unas tablas que aceptó de antemano su rival, Rumanía, por su escasa insistencia ofensiva.