La ciudad de East Point recibe un importante apoyo de socios federales para abordar problemas por su tuberías antiguas.
Este esfuerzo forma parte de una iniciativa para asegurar que decenas de miles de georgianos tengan acceso a agua corriente segura y confiable.
East Point ha informado que suministra agua a unos 70.000 residentes, incluidos los de College Park y Hapeville.
«Si la gente no tiene agua potable, la salud de nuestra comunidad está en riesgo», declaró la alcaldesa de East Point, Deana Holiday Ingraham.
La alcaldesa mencionó que una de las prioridades de la ciudad es abordar la infraestructura de agua envejecida, ya que más de la mitad de sus tuberías tienen entre 60 y 70 años de antigüedad.
La urgencia de mejorar los sistemas de agua se ha intensificado debido a los recientes cortes de agua en Atlanta. East Point reporta un promedio de una a dos roturas de tuberías principales de agua por semana.
Sin embargo, estas roturas deberían disminuir con el tiempo.
«Solo este año, con el impuesto municipal a las ventas, hemos podido invertir cinco millones de dólares en mejoras de infraestructura, enfocándonos en los puntos más problemáticos», afirmó la directora de Recursos Hídricos de East Point, Melissa Echevarría.
El lunes, el senador estadounidense Jon Ossoff estuvo en East Point anunciando una legislación que fortalecería los proyectos de infraestructura de agua en East Point con la asistencia del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos.
Ossoff informó que está presentando proyectos de ley similares para otras comunidades en Georgia.
«La infraestructura de agua necesita urgentemente actualizaciones y mejoras en todo el estado de Georgia», aseguró Ossoff.