Tras casi una década viviendo con pánico de ser separado para siempre de su esposa, quien es ciudadana estadounidense, Alex Paz Medrano dio gracias el martes cuando el presidente, Joe Biden, anunció un plan para que puedan permanecer juntos.
Biden anunció una acción ejecutiva para proteger de la deportación a cerca de medio millón de personas indocumentadas casadas con estadounidenses.
El alivio migratorio, del que se había reportado durante semanas antes de su anuncio formal, suscitó aplausos y entusiasmo entre los defensores de los inmigrantes y muchos demócratas que han estado presionando a Biden para que diera ese paso.
“Todos queremos salir adelante, todos queremos progreso para nuestras familias y estoy muy agradecida en nombre de la gente que se beneficiará de tener más oportunidades”, dijo Paz Medrano.
Medrano, quien vive en Hanover, Pennsylvania, emigró de México en 2005 y está casado con una ciudadana estadounidense desde 2016.
Defensores de los inmigrantes y políticos demócratas indicaron que el alivio de Biden pueden ayudar a movilizar a un segmento sustancial de votantes latinos y de otros sectores que han abogado por proteger de la deportación y la separación familiar a inmigrantes que han vivido en Estados Unidos por años. Esto, a pesar del creciente apoyo entre los votantes hispanos a medidas fronterizas más estrictas.
“Tengo muchos empleados que están en esa situación: va a ser una gran ayuda para mucha gente”, dijo Pedro Zamora, propietario de varios restaurantes y clubes nocturnos en Nueva York que emplea a unas 400 personas, entre ellas algunas con cónyuges indocumentados. Zamora había abogado en Washington por el cambio de política.
Biden anunció que, cuando se promulgue el plan, los cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses que lleven en Estados Unidos al menos 10 años a partir del 17 de junio de 2024 podrán solicitar la residencia legal permanente.
En lo que significa un cambio importante respecto a las reglas actuales, los cónyuges sin estatus legal podrán solicitar la green card desde Estados Unidos y no tendrán que volver a sus países de origen para hacerlo, lo que había provocado largas separaciones.
Biden también anunció medidas para facilitar que algunos inmigrantes que son graduados universitarios, incluidos los del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, o DACA, obtengan visados de trabajo.
“Sé que el anuncio de hoy cambiará la vida de muchas personas que, como yo, estaban preocupadas por su seguridad y su futuro”, precisó Bruna Sollod, directora política de la organización de defensa de los jóvenes inmigrantes United We Dream.
En busca del voto latino
La acción ejecutiva del martes contrasta con las recientes duras políticas de Biden que restringen el asilo, anunciadas a principios de este mes. Muy criticada por algunos, la Administración y sus partidarios la consideran una forma de poner orden en la frontera.
En su conjunto, ambas medias se asemejan a los proyectos de reforma migratoria que el Congreso ha fracasado repetidamente en aprobar.
Carlos Odio, cofundador de Equis Research, una encuestadora demócrata, dijo el martes en una llamada con periodistas que las dos acciones ejecutivas de Biden reflejan el tipo de política migratoria que las encuestas muestran que los estadounidenses prefieren: orden en la frontera y alivio para quienes han vivido en Estados Unidos durante mucho tiempo.
Odio señaló que una encuesta reciente de Equis Research, realizada entre 3,569 votantes registrados en Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pennsylvania, Wisconsin, California, Illinois, Maryland y Nueva York, mostró que los votantes ya no ven a los demócratas como los mejores en la gestión de la inmigración.
La encuesta arrojó que el 49% de los votantes registrados no hispanos y el 41% de los hispanos confiaban más en Trump en materia de inmigración, frente al 38% y el 34% que confiaban en Biden.
Casi tres cuartas partes de los encuestados indicaron que habían perdido esa confianza en los demócratas en materia de inmigración porque “Biden y los demócratas hacen promesas sobre la reforma migratoria durante la campaña, pero no las cumplen una vez que han ganado”.
También los votantes latinos “indecisos” que no apoyaban a Biden, dijero que es más probable que lo apoyaran si adoptara políticas que permitan trabajar y permanecer en el país a quienes hayan vivido aquí por mucho tiempo. El número fue mayor entre los que escuchan los medios de comunicación en español, apuntó Odio.
“Sólo a los votantes no hispanos que apoyan a Trump no les gustan (las políticas)”, agregó.
Gustavo Torres, de la organización de defensa de los inmigrantes CASA in Action, con sede en Maryland, dijo a los periodistas en la llamada que “si la Administración Biden sigue avanzando en esta dirección, vamos a ver una explosión de energía en nuestra comunidad”, añadiendo que las acciones del presidente ayudarán a movilizar a los votantes en estados como Georgia y Pennsylvania.
Vanessa Cárdenas, del grupo de defensa de los inmigrantes America’s Voice, quien calificó las acciones del presidente como “algo grande”, aseguró que lo que Biden debe hacer ahora es establecer una “clara distinción” entre su enfoque y el del expresidente Donald Trump, y añadió que el plan del asesor de Trump Stephen Miller es deportar a las mismas personas que “este plan está protegiendo”, incluidos los inmigrantes que llevan años en el país.
“Debemos tomarlos en serio”, comentó Cárdenas sobre los planes de deportación masiva de Trump.