Cerca de veinte personas estaban desaparecidas este martes en China tras las fuertes lluvias e inundaciones que azotaron el sur del país, mientras el norte registra sus temperaturas más altas del año.
La agencia estatal de noticias Xinhua informó que cuatro personas se encontraban en paradero desconocido tras una inundación repentina en Changji, en la región noroccidental de Xinjiang, donde las lluvias torrenciales provocaron corrimientos de tierra y atascos en las carreteras.
Los corrimientos de tierra en Meizhou, en la provincia sureña de Guangdong, dejaron el lunes un saldo de cinco muertos y 15 desaparecidos, según la cadena estatal CCTV.
Las imágenes de CCTV mostraron vehículos volcados y edificios dañados cerca de Meizhu, con residentes abriéndose paso por calles llenas de barro y escombros.
Otras imágenes mostraron tramos de autopista arrasados por corrimientos de tierra y socorristas con chalecos salvavidas conduciendo lanchas neumáticas a través de las aguas para llegar hasta las personas atrapadas.
El presidente chino, Xi Jinping, pidió a los trabajadores de emergencias que «hagan todo lo posible para responder a las situaciones de desastre y hacer un buen trabajo de rescate», informó Xinhua el martes.
También pidió a los equipos de rescate que «garanticen la seguridad de la vida y los bienes de la población, así como la estabilidad social en general», según Xinhua.
En la vecina provincia de Fujian, más de medio millón de personas se han visto afectadas por «continuas lluvias e inundaciones», según los medios estatales.
Las inundaciones también han afectado a las provincias de Guangxi y Hunan, en el sur y en el centro del país.
A su vez, el norte de China está sufriendo una de las temperaturas más altas del año.
Se espera que el mercurio alcance los 39 grados el martes en la capital, Pekín, y en las zonas circundantes de Tianjin y Hebei.
China está sufriendo un verano de condiciones meteorológicas extremas que, según los científicos, son más frecuentes debido al cambio climático.