Estoy feliz porque ganó Universitario de Deportes en su debut, pero a la vez debo compartir la indignación colectiva que sentimos desde el Círculo de Periodistas Deportivos del Perú al solo dejar ingresar a un número limitado de colegas. Se ha dejado fuera a los de radio y prensa digital sin oportunidad de dar cobertura a los partidos de primera división de fútbol profesional peruano.
Por ello, extiendo mi preocupación e insto a todos los medios de prensa deportiva, colegas, amigos, dueños de empresas de medios de comunicación y opinión pública a la unión para revertir esta situación. No se puede vulnerar el derecho a trabajar a quienes están debidamente acreditados por una directiva sin sustento ni base legal que es remitida por el organizador del torneo peruano de fútbol profesional 2023.
Es lamentable, pero es una cuestión de Estado que debemos resolver en el Perú. La Federación Peruana de Fútbol suma otro lío más al que ya existe con los clubes por los derechos de televisión. Pareciese que su afán es alejar a los hinchas del producto y, peor aún, si bien es cierto los clubes profesionales están divididos y compiten entre sí, es otra la realidad y visión al interior del país. Son las bases regionales quienes sostienen a un presidente que tiene jurisdicción nacional que ‘solo trata de quedar bien’ con sus electores del interior y que a la fecha solo genera más división entre quienes invertimos y trabajamos para beneficio y crecimiento del fútbol peruano.
Esto tiene que cambiar urgentemente, ya que sin un torneo peruano profesional ordenado y competitivo estamos condenados a jugar amistosos internacionales de caridad por la gestión de la marca que nos patrocina y viste, pero sin rumbo ni expectativa ni nivel deportivo real para buscar una clasificación al próximo mundial. #BarretoRecomienda