La Casa Blanca ha descartado este martes apoyar un proyecto de ley bipartidista en la Cámara de Representantes para sancionar a altos cargos del Tribunal Penal Internacional (TPI) en represalia por la petición de la Fiscalía de emitir una orden de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
«No creemos que las sanciones contra el TPI sean el enfoque correcto en este caso», ha indicado el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, en una rueda de prensa, recordando además que el tribunal «no tiene jurisdicción» sobre la ofensiva militar lanzada por Israel en la Franja de Gaza.
Esto se produce después de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijera la pasada semana que estaría dispuesto a trabajar con los republicanos en el Congreso para responder de forma «adecuada» a la petición de la Fiscalía del TPI.
El presidente de la comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, el republicano Michael McCaul, se mostró a favor de aprobar un proyecto de ley bipartidista con «fines de disuasión» en respuesta al anuncio del fiscal general Karim Khan.
Un grupo de 121 ONG, entre ellas Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional America, pidieron al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que se oponga a esta iniciativa, cuyo objetivo es «socavar» al TPI, y condenaron también una carta enviada el 24 de abril por senadores estadounidenses que amenazaba con sanciones.
La Fiscalía del TPI anunció el pasado 20 de mayo la emisión de órdenes de arresto contra Netanyahu y el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, así como contra el líder de Hamás en Gaza, Yahya Sinwar; el cabecilla del ala militar del grupo, Mohamed Diab al Masri, conocido como ‘Abú Deif’; y el jefe del brazo político de la formación, Ismail Haniye, por supuestos crímenes de guerra y contra la humanidad a raíz de los ataques del 7 de octubre por parte del grupo islamista y la posterior ofensiva israelí contra Gaza.