En la columna de esta semana quiero que profundicemos en un hábito financiero que nos aleja mucho de construir la vida que realmente valoramos: los antojos financieros. ¿A qué me refiero con esto? Son esos pequeños gastos, los famosos gastos hormiga que, aunque no lo parezca, pueden tener un impacto considerable en nuestra economía.
¿Cuántas veces al mes cedes a la tentación y compras algo en la tienda de conveniencia, adquieres un artículo que no necesitas «por las dudas”, tomas un taxi porque tienes prisa o pides comida a domicilio porque no te organizaste con las comidas? ¿Alguna vez has hecho el cálculo de la cantidad de dinero que destinas a estos “antojos”?
La mayoría de las personas no tienen ninguna noción de cuánto dinero destinan a estos antojos diarios y luego no entienden por qué siempre llegan justas a fin de mes, no logran ahorrar o inclusive se endeudan. Muchas se autoengañan y dicen “Yo gasto súper poco e igual no logro ahorrar”. Es como las que dicen «no como nada y engordo», donde no son conscientes de todo lo que consumen durante el día. ¡Lo más terrible de todo esto es la sensación interna de que no hay solución! Porque si realmente sientes que gastas poco/ comes poco y así y todo no logras ahorrar o adelgazar, te quedan menos acciones para llevar a cabo y sobre todo te desmotivas porque tu esfuerzo no vale la pena. Dicha desmotivación hace que renuncies siguiendo este ejemplo al ahorro o al adelgazar y empeores más aún tus “antojos” ya sea financieros o alimenticios.
Pero aquí está la clave: estos «pequeños» gastos realmente desordenan tus finanzas y te alejan de alcanzar tus objetivos y por lo tanto de vivir la vida que realmente valoras. Te propongo comprometerte contigo misma durante un mes completo (¡comienza hoy aunque estemos a mitad de mes! no te pongas excusas) y registrar absolutamente todos estos gastos. Te sorprenderás al descubrir cómo esos “antojos financieros” se transforman en una suma de dinero significativa. Cuando multiplicas esa cifra por todo un año, podrían financiar tus vacaciones soñadas. Sí, aunque no lo creas.
El registro llévalo de la manera que mejor te resulte, ya sea mediante una aplicación, como Expense Bookipi, notas en tu teléfono o una simple libreta. Lo importante es que lo hagas, ya que solo así podrás tomar control de tus finanzas y acercarte más a tus metas financieras. ¿Te animas a hacer un seguimiento detallado de tus “antojos financieros”?
Dentro de un mes, cuando tengas esos números bien claros, te voy a compartir ideas para que dejes de tentarte de esos antojos financieros con convicción e inclusive con alegría. ¡Vamos que tú puedes! Compárteme tu experiencia
“Si desarrollar tu Inteligencia Emocional Financiera te es COHERENTE, ¡VALE!”
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