Aterrador fue el asesinato de los cinco jóvenes de los Altos de Moreno Jalisco. El video y fotografías que circularon ponen en evidencia la crueldad con la que opera el crimen organizado en México, el cual cada vez gana más protagonismo. No hay duda de la fuerza militar que poseen, la dominación de territorios, la lucha por el control de plazas y la violencia extrema que utilizan hacen frente a la incapacidad de las fuerzas oficiales para combatirlos.
No hay día en que no nos enteremos de narcobloqueos, cuerpos mutilados y abandonados en la vía pública, personas desaparecidas y posteriormente encontradas muertas, y lo que es peor, la desinformación de los hechos y las ineficientes respuestas de las autoridades. Los grupos del narco presumen su fuerza hasta con el uso de vehículos llamados “monstruos” o rinocerontes que, camuflados, circulan por zonas urbanas causando pánico entre los habitantes.
La BBC Mundo publicó una entrevista con David Saucedo Torres, consultor en seguridad especializado en crimen organizado quien compartió su hipótesis con relación al caso de los cinco jóvenes de Jalisco: “Sabemos que en Lagos de Moreno hay centros de reclutamiento forzado y entrenamiento criminal de jóvenes para incorporarlos al Cártel Jalisco Nueva Generación. Todo parece indicar que los jóvenes fueron secuestrados, llevados con engaños y después obligados a sumarse al Cartel Jalisco”. La imagen de los cinco desaparecidos en Lagos de Moreno es atroz, pero coincide con las pruebas de sicariato que impone el narco a los jóvenes que reclutan. En los reclutamientos forzados obligan a los jóvenes a realizar asesinatos e incluso la ingesta de carne humana.
“(Es) para poder nutrir a su vasto ejército. Ya no es suficiente la oferta económica, es decir, ofrecerles salarios competitivos, debido a la alta letalidad que hay en los enfrentamientos con rivales en otros estados. En México tenemos una guerra civil en el bajo mundo criminal entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación”, expresó el especialista.
Durante el gobierno de AMLO se han registrado 163 mil 246 homicidios en todo el país. Esta cifra se compara con los 156 mil 066 del gobierno de Peña y los 120 mil 463 de Felipe Calderón. Así mismo, en lo que va de este Gobierno se tiene el registro de 95 homicidios diarios contra los 71 de Peña y 55 de Calderón. “Ya rebasamos el total de lo que sucedió en el sexenio de Peña Nieto y Calderón. No estamos mejorando, al contrario, vamos empeorando significativamente. La violencia sigue siendo brutal. Lo que nos dicen desde Palacio Nacional no corresponde con la realidad”, subrayó Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano.
A nivel estatal, son catorce estados los que registraron aumentos en la tasa de homicidio doloso, siendo Colima la entidad más afectada al reportar cifras hasta 4.5 veces mayor que la tasa a nivel nacional. Le siguen en nivel de violencia los estados de Morelos, Baja California, Zacatecas, Chihuahua, Guanajuato, Sonora, Guerrero, Quintana Roo y Michoacán.
Otro dato que refleja la violencia que se vive en México son las desapariciones que a la fecha suman 109 mil 705 casos, contra los 99 mil 284 con Peña. En Jalisco hay 14 mil 877 casos en donde la mayor incidencia se da en el “triángulo del terror” que representan los municipios de Tepatitlán, Lagos de Moreno y Colotlán, en los Altos de Jalisco, en donde se vivió el terrorífico asesinato de los cinco jóvenes.
El 2023 ha sido el año que más muertes ha arrebatado al Ejército mexicano. A la fecha, 47 elementos han perdido la vida en el combate al narcotráfico, cifra que compara con 29 muertes en 2022. Sinaloa es el estado en donde han muerto más militares seguido por San Luis y Tamaulipas. En lo que va del gobierno de AMLO, 133 integrantes del Ejército han fallecido.
Otro dato de terror son los explosivos sembrados en 17 de las 32 entidades del país. De acuerdo con reportes oficiales, la SEDENA ha desactivado desde agosto del 2022 a julio de este año, dos mil 241 artefactos explosivos artesanales colocados en caminos de terracerías y zonas urbanas. El 75% de las minas se ubican en Michoacán, Chihuahua, Jalisco, Chiapas y Guanajuato.
La violencia es el mayor fracaso del Estado mexicano. AMLO pasará a la historia, entre otros datos, por tener el Gobierno con más asesinatos. Su estrategia de “abrazos no balazos”, es una burla para la sociedad que vive aterrorizada. Fue un sexenio perdido.
El próximo presidente o presidenta deberá tener una política más enérgica en temas de seguridad y protección para las familias mexicanas.
No hay lugar seguro en el país, todos estamos expuestos y vivimos con temor.
Leticia Treviño es académica con especialidad en educación, comunicación y temas sociales, leticiatrevino3@gmail.com