Septiembre es el mes festivo por excelencia para los mexicanos. Aunque también celebramos en mayo y en noviembre cuando recordamos a los fieles difuntos y la revolución respectivamente, en septiembre gritamos ¡VIVA! por la independencia de México y lo hacemos con mucho orgullo por nuestra identidad y raíces.
La independencia tiene que ver con soberanía, con el derecho de los pueblos a decidir sus asuntos, su tipo de gobierno, y estructura de trabajo y de relación entre los ciudadanos. Es la exigencia por respetar la cultura, las creencias y valores. Es privilegiar la unión entre los ciudadanos.
Recordar la batalla contra los españoles, que inició en 1810 y culminó 11 años después, trae a la memoria los motivos que tenían los mestizos y los criollos que estaban hartos de ser considerados ciudadanos de segunda. Estaban cansados de que las decisiones y los dineros del pueblo privilegiaran a España, la llamada madre patria. Se vivía una crisis económica, política y social derivada de las reformas borbónicas que generaron un profundo malestar del pueblo.
Quizá los valores más significativos en la lucha independentista de todos los pueblos son la libertad, el respeto, la justicia y la autogestión. Pero también está el reconocimiento de igualdad de todos los habitantes en sus derechos y oportunidades para tener bienestar y paz.
A veces el enemigo está en casa. Cuando se abusa del poder político y se permite la desigualdad, la discriminación y la violación de los derechos humanos, es como si se repitieran las condiciones coloniales.
Tener independencia es tener educación, servicio médico y mecanismos de justicia para todos. Es tener condiciones seguras de vida: opciones de movilidad social, instituciones que garanticen el ejercicio de derechos, respeto a procesos electorales, procesos deliberativos en la toma de decisiones relacionadas con asuntos ciudadanos, transparencia en procesos y ejercicios de rendición de cuentas e interés por escuchar e involucrar a la ciudadanía en los temas que competen al pueblo.
Es estar unidos por el bienestar general y despertar ante el autoritarismo. El respeto a la Constitución es fundamental.
Lamentablemente tenemos un país en riesgo constante por problemas de violencia, narcotráfico, desigualdad y condiciones de privilegios asociados al poder político, con graves violaciones a los derechos humanos y con ejemplos contrarios a lo que se busca en la Independencia. Los invasores son el miedo, el hambre, la pobreza y los cárteles.
Vivimos con un gobierno que tiene un doble discurso. Dice que privilegia a los pobres y la democracia, pero tiene una abierta y afectiva relación con gobiernos autoritarios que violentan los derechos de la población, algo inaceptable por principios.
En el pasado grito y desfile del 15 de septiembre apreciamos una ceremonia en donde el presidente no invitó a los representantes de los poderes judicial y legislativo, “por no tener buenas relaciones y estar en contra del pueblo”, pero sí recibió a los contingentes de Rusia, China, Colombia, Cuba, Ecuador, El Salvador, Nicaragua y Venezuela países considerados “hermanos”.
Esta acción no solo es una afrenta al pueblo mexicano sino a la comunidad internacional. Estamos celebrando la Independencia de México y AMLO festeja con Rusia que está invadiendo a Ucrania, una nación soberana, cometiendo crímenes de guerra y matando a civiles.
La embajadora de Ucrania en México señaló que el desfile fue mancillado por los militares rusos porque “sus botas y manos de criminales de guerra están manchadas de sangre”.
Mientras Joe Biden reiteraba el apoyo a Ucrania en la pasada Asamblea de la ONU, su vecino Andrés Manuel rendía pleitesías para los comunistas y criminales.
“En el desfile marcharon, desfilaron, contingentes de Rusia. Hicieron un escándalo. Me llamó la atención porque también desfilaron de China y no hubo tanto escándalo, todo fue por Rusia. Se invitó a todos los gobiernos con los que México tiene relaciones, siempre se hace”, se justificó el presidente.
¿Es este el humanismo mexicano?, ¿así queremos los mexicanos festejar nuestra Independencia?
Xóchitl Gálvez, del Frente Amplio por México, criticó la participación de militares de gobiernos autoritarios y señaló que “ya quedó claro que sus amigos (de AMLO) son los dictadores”.
Por su parte Claudia Sheinbaum, celebró el desfile militar en sus redes sociales, “213 años del inicio de la independencia de nuestra grandiosa patria que hoy vive un momento estelar”, expresó.
¿Vivimos un momento estelar?
El ¡VIVA! México se debe demostrar con acciones y hechos que reflejen el espíritu democrático que se basa en los derechos humanos.
Leticia Treviño es académica con especialidad en educación, comunicación y temas sociales, leticiatrevino3@gmail.com