El expresidente y presumible candidato republicano en las elecciones de noviembre, Donald Trump, exigió este viernes que su rival en las urnas, el demócrata Joe Biden, se someta a un test de drogas antes de participar en los dos debates presidenciales que ambos acordaron celebrar.
Para justificar tal petición, el expresidente estadounidense citó el discurso del Estado de la Unión del actual presidente el pasado marzo: «Estaba drogado como una cometa».
«Solo quiero debatir con este tipo, pero también voy a exigir una prueba de drogas, por cierto», señaló Trump durante su discurso en una cena del Partido Republicano en St Paul (Minnesota).
No es la primera vez que Trump hace este tipo de insinuaciones. Hace un mes, el republicano sugirió que el presidente de EEUU se «droga» cuando tiene grandes eventos como el debate del Estado de la Unión. «Creo que lo que pasó fue que, ¿sabes, esa cosa blanca que encontraron y que resultó ser cocaína en la Casa Blanca? No lo sé, creo que algo está pasando ahí, porque vi su intervención en el Estado de la Unión y estaba muy entusiasmado al principio. Al final se estaba desvaneciendo rápidamente. Volaba más alto que una cometa», aseguró en una entrevista en el programa de radio de Hugh Hewitt.
Por el momento solo hay confirmados dos debates entre los dos candidatos, el primero de ellos organizado por CNN y que se celebrará el 27 de junio en los estudios de este canal, en Atlanta (Georgia). El segundo lo hará la cadena televisiva ABC News el próximo 10 de septiembre, en una ubicación y hora aún por definir.
Biden, por su parte, ha rechazado otras dos propuestas de debate con Trump: el de NBC News junto a la cadena hispana Telemundo y el de la conservadora Fox News en conjunto con la Universidad Estatal de Virginia.
Horas antes de hacer esta petición de un test de drogas, Trump volvió a recurrir en un mitin en St Pau a la acusación, sin pruebas, de un «amaño electoral» en las elecciones que perdió en 2020, cuyos resultados sigue sin reconocer casi cuatro años después.
El exmandatario afirmó que en aquellos comicios ganó con mucho margen, si bien los resultados oficiales revelan que perdió por más de 200.000 votos contra Biden. «Tenemos que tener cuidado, tenemos que vigilar esos votos», alertó en este estado al que juró no volver tras conocerse los resultados de las elecciones de 2020.
Ante esta situación, Trump prometió que si regresa a la Casa implantará una identificación electoral, un requisito que los demócratas rechazan porque, según afirmó, quieren seguir «engañando».
Como suele hacer en todos sus mítines, Trump volvió a arremeter contra Biden con duros calificativos como «el peor presidente en la Historia de Estados Unidos» o «corrupto» y al que acusa de emprender un gestión económica «terrible».
Trump prometió además emprender una «deportación masiva» de inmigrantes, para contrarrestar la «políticas de fronteras abiertas» de la actual Administración en la Casa Blanca, gracias a la cual han entrado al país -según su opinión- «miles de criminales».