El presidente de Estados Unidos Joe Biden se enfrenta a críticas por parte de legisladores de ambos partidos por su ultimátum de que una gran ofensiva israelí en la ciudad de Rafah daría lugar al corte de suministro de algunas armas estadounidenses.
La decisión de Biden de hacer público el ultimátum en una entrevista con Erin Burnett de CNN la semana pasada fue recibida con duras críticas en todo el espectro republicano este domingo y generó preocupación entre los demócratas.
“Por un lado, dicen que murieron demasiados civiles palestinos. Por otro lado, estaría privando de las armas guiadas de precisión que realmente reducen las víctimas civiles”, dijo el senador republicano JD Vance de Ohio a Dana Bash de CNN en el programa “State of the Union”, aunque Biden mencionó específicamente la retención de bombas y munición de artillería, que son considerados indiscriminados e imprecisos por la administración.
«Así que si estás preocupado por las bajas palestinas, la política declarada aquí en realidad no tiene mucho sentido», dijo Vance.
El anuncio del presidente supuso un punto de inflexión en las relaciones entre Estados Unidos e Israel desde que comenzó en octubre el conflicto de siete meses entre Israel y Hamas. Aun así, los asesores del presidente dijeron que el mensaje no debería haber sido una sorpresa para sus destinatarios en Israel, dadas las repetidas advertencias al primer ministro Benjamín Netanyahu.
A principios de este mes, Biden firmó una suspensión en el envío de 3.500 bombas a Israel que los funcionarios de la administración temían que fueran lanzadas sobre Rafah, donde Israel emitió órdenes de evacuación para algunos de los 1,4 millones de civiles estimados que se refugian allí, ya que parece estar preparado para continuar su avance sobre la ciudad del sur de Gaza.
Y la semana pasada, Biden le dijo a Burnett que si Israel entra en Rafah, no iba “a suministrar las armas que se utilizaron históricamente para lidiar con Rafah, para lidiar con las ciudades, que se ocupan de ese problema”.
El senador republicano Lindsey Graham, de Carolina del Sur, calificó el ultimátum como “la peor decisión en la historia de la relación entre Estados Unidos e Israel”. Graham, crítico frecuente de la Casa Blanca, pidió a la administración de Biden que “mantenga el flujo de armas” y se discuta con Israel.
En paralelo, el senador republicano Rick Scott de Florida dijo a Fox News este domingo que la decisión de Biden envía “un mensaje horrible para Israel” y afirmó que el presidente es “desafortunadamente, ahora parte del ala pro-Hamas de su partido”.
Pero la crítica no fue sólo en líneas partidistas.
El viernes, un grupo de 26 demócratas de la Cámara de Representantes envió una carta a Biden diciendo que están “profundamente preocupados por el mensaje que la administración envía a Hamas y otros representantes terroristas respaldados por Irán al retener los envíos de armas a Israel”.
El grupo de demócratas de la Cámara de Representantes, liderado por el representante Josh Gottheimer de Nueva Jersey, también solicitó una sesión informativa de la Casa Blanca para obtener más información sobre la decisión de Biden, así como cómo y cuándo se entregará la ayuda asignada por el Congreso para Israel.
Sin embargo, el representante demócrata Adam Smith del estado de Washington destacó los tipos de armas que se retienen. “El presidente no fue tan claro en esto en la entrevista con Erin Burnett como debería haber sido”, dijo este domingo en Fox News, y agregó: “Todo lo que se retuvo hasta la fecha son bombas de 2.000 libras porque el presidente siente –y creo que con razón– no deberían utilizarse en Rafah”.