Israel y Estados Unidos, dos aliados de larga data que muestran algunas desaveniencias en medio de la guerra en Gaza.
La frustración y el descontento crece en el Gobierno israelí, luego de que la semana pasada el Gobierno de Joe Biden detuviera el envío de cargamentos de armas para el Ejército del Estado de mayoría judía, aunque la información fue filtrada a la prensa israelí en los últimos días.
Entre los artefactos retenidos se encuentran bombas pesadas que el aliado estadounidense ha utilizado en su ofensiva en el enclave palestino.
Pero pese al objetivo declarado del Gobierno de Benjamin Netanyahu de “eliminar” a Hamás, la gran mayoría de las más de 34.900 víctimas mortales son civiles, incluidos miles de niños y mujeres.
El nuevo movimiento de Washington llega en momentos en que Netanyahu pasa de una ofensiva aérea a ataques por tierra en Rafah, en el extremo sur del territorio gazatí donde se refugia la mayor parte de la población internamente desplazada, por lo que algunos gobiernos y Naciones Unidas han alertado de una “catástrofe humanitaria” aún mayor a la que ya enfrentan los gazatíes.
No obstante, Israel ha insistido en que por ahora en Rafah sostiene una ofensiva terrestre “limitada” con algunos combates contra grupos armados palestinos, mientras sigue advirtiendo con ataques de mayor escala en la zona.
Ahora, y por primera vez en siete meses Biden advierte públicamente que dejará de suministrarle armas a Israel si continúa con su objetivo de ataque a gran escala en Rafah.
¿Qué tipo de armas fueron retenidas por Estados Unidos?
Washington detuvo un envío que consistía en 1.800 bombas de 2.000 libras y 1.700 bombas de 500 libras, según funcionarios estadounidenses.
Cuatro fuentes citadas por Reuters señalaron que los cargamentos, que se han retrasado durante al menos dos semanas, incluyen municiones conjuntas de ataque directo fabricadas por Boeing, que convierten bombas tontas en bombas guiadas con precisión, así como bombas de pequeño diámetro SDB-1. Este último tipo de artefacto consiste en una bomba deslizante guiada con precisión que contiene 250 libras de explosivo.
Todos formaban parte de una entrega aprobada anteriormente para Israel, no del reciente paquete de ayuda suplementaria de 95.000 millones de dólares que el Congreso de Estados Unidos aprobó el pasado abril, agregaron las fuentes.
¿Por qué EE. UU. frena el envío de estas bombas?
Estados Unidos se encuentra revisando «la asistencia de seguridad a corto plazo», señaló el secretario de Defensa, Lloyd Austin, en una audiencia en el Senado el miércoles 8 de mayo «en el contexto de los acontecimientos que se desarrollan en Rafah».
«Hemos sido muy claros (…) Desde el principio en que Israel no debería lanzar un ataque importante contra Rafah sin tener en cuenta y proteger a los civiles que se encuentran en ese espacio de batalla», remarcó Austin.
Más de 1,4 millones de civiles palestinos han buscado refugio en esa gobernación, que incluye la ciudad homónima, en el extremo sur del enclave, cerca a la frontera con Egipto. Muchos de ellos ya habían sido previamente desplazados de otras partes de Gaza tras las órdenes del Ejército israelí de “evacuar”, aunque son acciones consideradas por la ONU como desplazamiento forzado.
La decisión de Washington se tomó debido a preocupaciones sobre el «uso final de las bombas de 2.000 libras y el impacto que podrían tener en entornos urbanos densos como hemos visto en otras partes de Gaza«, según declaró un funcionario estadounidense que habló bajo condición de anonimato.
Estados Unidos había revisado cuidadosamente la entrega de armas que podrían usarse en Rafah, agregó la fuente.
¿Qué tipo de daño pueden causar las bombas de 2.000 libras?
Las bombas grandes, como las de 2.000 libras, tienen un impacto en un área amplia.
Según Naciones Unidas, «la presión de la explosión puede romper los pulmones, reventar las cavidades sinusales y arrancar extremidades a cientos de metros del lugar de la explosión».
La Comisión Internacional de la Cruz Roja, en un informe de 2022, informó que el uso de explosivos de gran alcance en una zona densamente poblada «es muy probable que tenga efectos indiscriminados o viole el principio de proporcionalidad».
¿Es legal que Israel utilice estas bombas en Gaza?
Se trata de un tema de acalorado debate.
El Derecho Internacional Humanitario no prohíbe explícitamente los bombardeos aéreos en zonas densamente pobladas.
Sin embargo, los civiles no pueden ser objetivos y un blanco militar específico debe ser proporcional a las posibles víctimas o daños civiles.
El estatuto de la Corte Penal Internacional, que investiga la guerra entre el Ejército de Israel y Hamás, cataloga como crimen de guerra el lanzamiento intencionado de un ataque cuando se sabe que las muertes o daños civiles serán «claramente excesivos», en comparación con cualquier ventaja militar directa.
Pero además de los aspectos humanitarios, podría haber razones políticas detrás de la decisión.
El embajador de Israel ante Naciones Unidas, Gilad Erdan, declaró que la medida de Biden se debe a la presión política después de las protestas propalestinas en las universidades a lo largo de EE. UU. y de cara alas elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre, en las que el mandatario se enfrentará en las urnas al polémico líder republicano, Donald Trump.