Argentina vive desde la madrugada de este jueves (09.05.2024) su segunda huelga general desde que comenzó el mandato del ultraliberal Javier Milei como presidente del país suramericano, el pasado 10 de diciembre.
Tras su alto poder de convocatoria en enero, cuando tuvo lugar la primera huelga general en el país desde mayo de 2019, bajo el gobierno del centroderechista Mauricio Macri (2015-2019), la Confederación General del Trabajo (CGT), la principal central obrera de Argentina, espera paralizar el país en contra de las reformas estructurales que busca implementar el Ejecutivo.
En esta ocasión, y a diferencia de lo ocurrido en enero, la novedad es la paralización del transporte público -tanto autobuses como subterráneo (metro) y trenes-, que a comienzos de año solo se detuvo a partir de las 19:00 horas (22:00 GMT), cuando se hubo desconcentrado la gran movilización frente al Congreso.
Además de los trabajadores estatales y de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), se sumaron la Asociación Bancaria, que reúne a los empleados de las entidades financieras; la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA-T), que agrupa distintas actividades económicas; y los empleados de comercio bajo la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys).
También pararán el transporte aerocomercial y de carga, la banca, el comercio (en su mayoría), la educación y la recolección de residuos, mientras que el sector sanitario prestará una atención mínima, priorizando cualquier emergencia.
Este es el segundo paro general convocado por la CGT desde que asumió el gobierno de Milei, el pasado 10 de diciembre de 2023, tras el del 24 de enero.