El presidente de Kenia, William Ruto, ordenó este miércoles que las escuelas del país reabran el próximo lunes ante la previsión de que remitan las lluvias torrenciales que han causado al menos 238 muertos por las graves inundaciones.
Los colegios públicos retomarán así la actividad lectiva y darán inicio al segundo trimestre, cuyo arranque estaba previsto para el pasado 29 de abril pero que se tuvo que suspender dado el riesgo meteorológico, informó el Gobierno keniano en un comunicado.
La decisión se ha tomado con el visto bueno del Departamento de Meteorología de Kenia, que ha confirmado que las lluvias remitirán en los próximos días, aseguró Ruto durante una reunión con líderes regionales en su residencia oficial en Nairobi.
«Basándonos en la evaluación de los expertos y del Gobierno, ahora es seguro que nuestros niños vuelvan a la escuela», afirmó Ruto, según recoge el comunicado.
Asimismo, el presidente anunció que el Ejecutivo entregará fondos para la rehabilitación de las escuelas dañadas por las inundaciones y que se involucrará en la reparación de las carreteras afectadas.
Ruto declaró el próximo viernes festivo nacional para «recordar a los afectados por las inundaciones».
En una visita el lunes al suburbio nairobita de Mathare -con una población aproximada de medio millón de habitantes y fuertemente golpeado por las inundaciones-, Ruto prometió que todos sus vecinos recibirían ayuda económica para alquilar casas «durante los tres próximos meses, mientras el Gobierno restaura sus modos de sustento».
Sin embargo, muchas de las personas que empezaron a sufrir desde el pasado viernes desalojos y demoliciones en ese y en otros barrios marginales de la capital aseguran que no han recibido ninguna alternativa habitacional.
En este sentido, la organización Human Rights Watch (HRW) denunció que el Gobierno keniano no actuó a tiempo ni ha respondido de manera adecuada a las graves inundaciones, a pesar de las predicciones meteorológicas con las que contaba.
Este año, la temporada larga de lluvias, que va de marzo a mayo y afecta a todo el este de África, se ha visto intensificada por el fenómeno meteorológico de El Niño, un cambio en las dinámicas atmosféricas ocasionado por el aumento en la temperatura del océano Pacífico.