Bajo el lema de «ley y orden» y llevando como bandera la solidez económica de EE.UU., antes de la pandemia, el presidente Trump ha atraído a latinos, pero también los ha enfurecido con sus políticas migratorias y su retórica antiinmigrante.
«En un nuevo mandato como presidente, volveremos a construir la mayor economía de la historia, volviendo rápidamente al pleno empleo, aumentando los ingresos y registrando prosperidad». Este fue su principal señalamiento al momento de aceptar la candidatura del Partido Republicano para competir en la elección del 3 de noviembre 2020.
Es básicamente su plan de gobierno, la reactivación de la economía, algo obligado para cualquiera de los dos aspirantes que aspira ocupar el salón oval de la Casa Blanca, particularmente en este escenario pandémico. No obstante, queda por saber su pensamiento acerca de otros que preocupan a la sociedad norteamericana, a saber: el sistema de salud, el racismo, la desigualdad, el tema migratorio, el cambio climático, asi como el relacionamiento externo de Estados Unidos, por nombrar solo algunos temas pendientes. Cualquiera de los dos que asuma esa alta magistratura deberá enfrentar retos tan importantes como los que se asumieron después de la 2da guerra.
El presidente Trump ha toreado más de un temporal, emergiendo con la mira siempre puesta en conseguir la reelección. Sin embargo, esa forma de desenvolverse en la arena política lo sometió a una tormenta perfecta: la mayor crisis de salud pública en un siglo, la peor crisis económica en generaciones y los disturbios civiles más graves desde la década de 1960, lo cual, a juicio de quien escribe estas líneas, afecta al presidente en ejercicio, y a su reelección.
Así mismo ha hecho todo lo posible para alejar el manejo del coronavirus de la campaña presidencial, pero su propio contagio, casi logra sacarlo de la carrera a solo 3 semanas de las elecciones. Un presidente que alguna vez pareció insensible a las sorpresas de octubre de repente se enfrenta a una lo suficientemente grande como para alterar el resultado de las elecciones.
Vale señalar que el problema más significativo para Trump es como desviar la atención del público de su mayor responsabilidad política: El covid19. Los estadounidenses desaprueban el manejo de Trump de la pandemia de coronavirus por un amplio margen.
Si bien es cierto que es demasiado pronto para decir qué tan exitoso ha sido cada uno de los candidatos en el cumplimiento de sus objetivos de campaña electoral, también lo es que ya los votantes comenzaron a participar a través del voto anticipado o por el voto vía correo. Pero de lo que si pueden estar seguro es que el día 3 de noviembre de 2020 va a tener una duración de más de 48 horas antes de que se conozcan los primeros resultados parciales.