En estos días se celebra en México el día de muertos y en Estados Unidos el Halloween dos festividades un sentido muy distinto pero que se celebran al mismo tiempo, desgraciadamente con la invasión cultural que viene del norte, en México, miles de nuestros niños engatusados por la sociedad de consumo se centran en festejar el Halloween con sus promesas de dulces y vestimentas originales y terroríficos desconociendo nuestro tradicional día de muertos .
El culto a los muertos se celebra aquí desde hace miles de años en estos días nos acercamos al espíritu de nuestros abuelos que ya no están con nosotros y los recibimos en nuestra hogares con ofrendas recordando su comida favorita, sus gustos, su imagen sentimos que están con nosotros nos acompañan y nos dan su cariño que rememoramos con calidez.
El día de muertos es una fiesta muy íntima y conmovedora al mismo tiempo, es un acontecimiento social y comunitario que nos conecta con los seres que amamos y que pasaron a otra vida. En nuestro país nos acercamos a nuestros muertos con ternura y cercanía y sobre todo los recibimos en nuestras casas con mucha confianza y tranquilidad. Es un día lleno de magia y encanto En México recordamos a nuestros muertos con alegría y optimismo vemos a las calaveras sonrientes y animosas y las tratamos de tú a tú con cercanía …colocamos ofrendas llenas de vida y color con velas que nos iluminan, papel crepe recortado artísticamente con dibujos variados e ingeniosos que muestran la creatividad de las y los mexicanos y en ellos colocamos platillos exquisitos de nuestra cultura culinaria que es de las mejores y más originales del mundo.
La ofrenda del día de muertos abre un espacio de reflexión y meditación y también de juego y diversión. Las calaveras que sirven para redactar poemas que nos divierten y sirven de crítica social a políticos y personajes famosos autoridades y celebridades son también un ejercicio que nos da sorpresas y motivo de regocijo cada año y que sirven para desacralizar a quienes están en posiciones de poder y agradecer o elogiar a quienes prestan un buen servicio a la comunidad.
Son también un rasgo característico de la cultura mexicana. La cultura del Anáhuac comprendía que todo es dual: muerte- vida, mujer-hombre, día-noche, frio-caliente, dulce-amargo, alto-bajo, frío-calor. De modo que la muerte: “Miquiztli” era complementaria a la vida “Yoliztli”. El “Nemiliztli”, la existencia en la cosmogonía náhuatl es dual. Hasta el ser supremo “Ometeotl” era la energía dual, compuesto por el “Ometecuhtli” el señor de la dualidad y “Omecihuatl” señora de la dualidad.
La concepción de la muerte en nuestras culturas milenarias en el Anáhuac y en todo el continente es muy distinta a la que tienen en Europa y que trajeron los invasores españoles ingleses franceses manifestándose más claramente en Estados Unidos lugar en el que no hubo una mezcla con la cultura de los indígenas del lugar o naciones originarias al grado que al vecino del norte se le conoce como la sucursal de Europa.
En la cultura europea y norteamericana a los muertos se les niega y aleja son motivo de pánico y terror se fomenta el temor a la muerte y a los muertos la muerte se niega y a los muertos se les trata de olvidar lo más pronto posible incluso a los ancianos antes de morir ya se les desprecia y aísla. El Halloween es motivo de espanto y amenaza es noche de brujas feas y malvadas de monstruos y personajes de películas de terror a los muertos lejos de recibirlos con los brazos abiertos se les tiene miedo y se les representa con máscaras de seres deformes, espeluznantes y repulsivos, quien vive con miedo a la muerte le tema a la vida misma porque vida y muerte son indisolubles tal como nos lo enseña nuestra cultura quien ama a sus muertos y contempla la muerte con tranquilidad y alegría disfruta la vida y su perspectiva futura, la muerte, que a todos nos espera sin excepción desde este punto de vista la cultura mexicana es sana y positiva y más realista porque todas y todos los que estamos abiertos a continuar la relación con nuestros amigos y parientes que se fueron al más allá hemos experimentado contacto y cercanía con nuestros difuntos que nos dan consuelo y alegría mientras que el terror a la muerte y el querer olvidar y negar la compañía de nuestros abuelos que se fueron es deprimente y antinatural el día de los muertos mexicanos es de convivencia y acercamiento.
En cambio, en Halloween se juega a la amenaza y el terror la costumbre de los niños en Norteamérica de llegar con disfraces para atemorizar a los vecinos y decirles “trick or treat” truco o trato para obligarlos a darles dulces a cambio de no ser asustados. Desarrolla sutilmente una cultura agresiva y de chantaje que por cierto en México se ha transformado en el mas amable me da mi calaverita por favor guardemos y desarrollemos nuestra costumbre y tradiciones sanas recordemos a nuestros muertos que son reales y no los cambiemos por brujas espantosas e inexistentes, rescatemos nuestras costumbres y por cierto también a nuestras brujas quienes según la concepción europea y eran quemadas vivas tan solo por ser mujeres sabias que practicaban la medicina alternativa y tenían formas de ayudar a la gente de distinta a las oficiales, y a las que permitía la santa inquisición.
En el México precuauhtemico las hoy llamadas brujas no causaban terror eran mujeres sabias parte de la sociedad muy respetadas y jugaban una función muy positiva Las brujas en México han sido buenas y no satanizadas como lo fueron en Europa, convoquemos en estos días a familiares vecinos y amigos y en particular a niñas y niños a poner su ofrenda a hacer sus calaveritas y a disfrutar y estar cerca de nuestros muertos en su día.
A los niños y niñas que celebran el inevitable Halloween hay que platicarles y explicarles la diferencia entre nuestro modo de ver la muerte y de sentirnos cerca de los nuestros con la cultura de temor y desconfianza al futuro típica del imperio yanqui. Seguramente la visión mexicana que es amable alegre y mágica va a triunfar en un futuro sobre la del temor y la desesperanza, este día de muertos rescatemos nuestra cultura tradicional tan rica y profunda nuestras ideas y concepciones heredadas de miles de años de los pueblos originarios, los pueblos indígenas que desarrollaron una gran civilización y también concepciones muy realistas y sensatas ante la vida y la muerte nuestra cultura tiene fuertes raíces que seguramente prevalecerán y darán frutos.